prefacio

PREFACIO

Este libro, es la compilación en artículos, de una parte de mi vida. Desde la edad de niño, sentí que mi adultez iba a ser tumultuosa. Pero no sabía cuanto ni cómo. Sobre todo, la época en la que esto iba a acaecer. Desde niño tuve la idea que en el futuro ( de ese momento) se encontraba el hombre que yo debía ser, evolucionado, estudiado, habiendo comprendido las dificultades de la existencia. Me lo imaginaba halándome hacia él cómo por una cuerda invisible. Este pensamiento me siguió toda la vida. Mi sensibilidad de ser humano me encaminó hacia la creación. Estando adolecente y después de mis estudios secundarios, me dije que quizás siendo periodista podría ejercer en lo escrito y posiblemente construirme como escritor. En el momento de decidirlo, leyendo un libro sobre Pablo Picasso, la escuela de bellas artes me sedujo de una manera definitiva. Pasé muchos años estudiando las obras artísticas de los maestros; esta parte se proyectó de una manera muy constructiva, cuando decidí de viajar a Europa, a pesar de los pocos medios con los que mis padres podían colaborar. En Francia, el Yo que era hasta ese momento, se vio envestido por un torbellino de acontecimientos que fueron puliendo mi sensibilidad. Como todos, estudié, trabajé, tuve mujer e hijos, fui padre colmándome esto último del verdadero amor que un ser humano puede sentir por otro. En aquel momento comprendí que ser adulto no es trabajar y ganar dinero; es tener en sus manos una pequeña vida que hay que amar, proteger, respetar e impulsar de la mejor manera en la existencia. Desde muy corta edad el mundo me pareció extraño e injusto. No comprendía el desequilibrio que se manifestaba en esta entidad llamada planeta tierra. El porque de que las personas que yo consideraba buenas y honestas eran tratadas en desventaja con relación a lo que humanamente ese tipo de seres merecen. Estas contradicciones alimentaron dudas que me permitieron hacer un paréntesis en todo aquello que aprendía y que debía proyectarme en un mundo donde mis esfuerzos iban a ser recompensado. Pero para nadie sucedía así. Yo digo que no vivimos y a penas existimos. La suerte de poder comprender todo aquello me vino en un momento de la vida. Digo la suerte porque la comprensión necesaria para no morir ignorante es una bendición a pesar del peligro al cual elle conlleva. Bendición porque con ella se encuentra el camino que muestra los aspectos oscuros que han convertido nuestras vidas en una casi existencia. Este momento fue alimentado por la necesidad de llenarme de un conocimiento escogido por mí y no por una escuela o universidad. Y ese fue mi camino durante varios años; esto me permitió de adquirir conceptos que me permitirían comprender otros aspectos del conocimiento humano que se sitúa al límite de la realidad. Yo lo llamo hoy después de mucho aprendizaje y confrontación de ideas y experiencias, lo para real. Lo eral es definido por la ciencia como todo aquello que es visible, concreto materialmente, comprobable materialmente y teniendo referencia con el pasado. Esta zona y concepción de lo real no permite comprender las incoherencias de nuestra época. Los millones de muertos, la miseria, la pobreza y la descomposición del ámbito humano. La decadencia es el producto de nuestra ignorancia; esta es en realidad une pequeña parte de conocimiento pérdida en un océano de mentiras. El espíritu humano posee la capacidad que la ignorancia presenta como posible. Tratando de creer que es posible, nos perdemos en el camino y nos olvidamos que se trata de nosotros mismos. El ser humano ha sido programado para satisfacerse demasiado rápido; es como querer viajar en Europa y contentarse viendo los catálogos. La facilidad es una enfermedad más mortífera que el cáncer; ella nos mata y seguimos vivos sin saber por qué. Muertos en vida; viviendo un simulacro por la obligación de estar "aquí". Como el mundo no se compone ni tiene intención de hacerlo, hay que preguntarse porque. 

Muertos en vida; viviendo un simulacro por la obligación de estar "aquí". Como el mundo no se compone ni tiene intención de hacerlo, hay que preguntarse porque. En mis escritos, Ud. va a encontrar conceptos y situaciones que avecinan con la "mentira y la locura". No porque lo sean, sino porque no tenemos la costumbre ni la preparación de afrontar tales hechos. Dentro del rango de mis experiencias, pasé más de diez años leyendo para hacerme una cultura propia, que me permitiese de dar suelo a experiencias que han sobrepasado lo real. Este viaje que me hizo atravesar las líneas rojas que delimitan el espacio donde un ser humano debe quedarse sin que su integridad no sea amenazada. Este espacio lo atravesé y atravieso cuotidianamente y esto me valió de ser excluido del derecho a la vida por la gente que tiene el poder de hacerlo. Mis experiencias de vida son un viaje hacia el contacto con lo para real. Aquí Ud. encontrará experiencias de lo que para otros es teoría o desinformación. Como David Yke, promotor o informador habiendo trabajado para comprender realidades que hoy día son aceptadas, mi suerte no depende de mis contradictores. El universo acaba por tener razón y por eso él se da los medios pertinentes.